El Síndrome de Scott es un relato detectivesco, con ribetes de aventura viajera, cuya acción se desarrolla en el marco opresivo del helado desierto antártico, en el seno de una pequeña comunidad científica.
Además de sus méritos descriptivos, la novela evidencia un gran dominio del vocabulario científico, tan raro en la tribu escritora, y un notable manejo de la intriga, con un final en el que las piezas del enigma quedan perfectamente ensambladas, algo difícil de conseguir en este tipo de obras.
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Espasa Calpe, 1993
El Aleph, 2001